En Santa Rosa-Misiones (Paraguay), un nuevo grupo de personas ha iniciado un proceso de formación, desde la propuesta del Plan de Formación Universal de la Compañía de María, “Mantener la llama, compartir el don”. En el camino de reflexión son acompañados por las Hermanas de la Compañía de María.
Una de las personas del grupo comparte su experiencia: “Soy Gladys Ramírez, fui profesora del Colegio Parroquial “San Estanislao de Kostka”, institución que por los años 1991 era dirigida por los Jesuitas. En esos años, los educadores del colegio iniciamos un proceso de formación acompañados por la Compañía de María, lo que dejó en muchos de nosotros profundas huellas humanas y cristianas, porque nos dieron a conocer a Jesús. Esa semilla sembrada, ha permanecido en el tiempo, y sentimos que hoy se renueva en nosotros al tener la posibilidad de continuar nuestra formación a través de este Plan.
El Señor tiene sus planes para con nosotras porque nos ha unido a través de esta formación a las ex compañeras, hoy docentes jubiladas. La alegría es indescriptible!.. poder seguir unida a la Compañía de María, quienes siempre tienden la mano a los más desprotegidos y propician el crecimiento de cada persona en lo espiritual, ayudando a descubrir la huella de Dios en sus vidas”.